Entre las hojas, sintiéndolas crujir
dentro del alma
y midiendo el dolor del aire transparente
y frío
surgió esta balada de otoño ocre amarillo
y pena inconfesada. Apenas bruma,
diría apenas pena,
apenas sombra y luz de media tarde
cuando en los ojos se prende
apenas
luz de poesía.
González Alonso
Lucernarios 
Para la poesía el otoño es primavera. Gracias por tan bonito poema, Julio. Un gran abrazo.
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¡Ah, sí! La poesía es caprichosa y tiene sus propias estaciones emocionales, ¿no te parece? Una alegría tu presencia en este breve poema. Gracias, Isabel. Mi abrazo.
Salud.
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Hermoso poema , cristalizado color de lo inevitable… el paso del tiempo. ¡Un cordial abrazo!
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Así es, amiga Bárbara, el paso del tiempo que tanto nos trae y tanto nos quita. Mi abrazo agradecido.
Salud.
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Otra preciosidad, Julio.
Como un pequeño perfume con una gran esencia.
Cariñosos saludos desde Palmeira.
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Un poema breve para acordarse del otoño en primavera, aunque el otoño pueda ser metáfora de la edad también. Bueno, algo así. Me encanta que te haya gustado este pequeño poema rescatado de una carpeta antigua. Mi abrazo hasta Palmeira.
Salud.
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Precioso, Julio.
Fuerte abrazo.
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Muchas gracias, Pedro; muy amable. Abrazo y salud.
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Hermosa balada de esa pena buscando poesía… Un placer de lectura. Gracias. ¡Mi abrazo y salud!
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Se trata de un poemita antiguo, de los que yo llamo «de rescate» y que estoy agrupando de alguna manera. Mil gracias, Julie. Mi abrazo y salud.
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