Sencillez

SENCILLEZ
Senzillesa
(A Mía i Emili amb afecte. Poema antic)

Se enviaban cartas con frases largas de palabras deslumbrantes
y bellas.
Enviaban papel mojado en tinta de bolígrafo.
Enviaban sueños asépticos y cansancio concentrado.

Y en la distancia el amor era deseo.
Y en la distancia el deseo era pasión.
Y en la distancia se consumía su impaciencia.

Alegraron las horas con promesas de besos.
Suspiraron con ofrendas de abrazos
y caricias
que cubrían las noches con el calor de sus cuerpos
y el frío del invierno.

Todo lo hicieron y todo lo intentaron.

Al final concluyeron
que lo mejor era amarse
sencillamente.
***
S’enviaven cartes amb frases llargues de paraules enlluernadores
i belles.
Enviaven paper mullat amb tinta de bolígraf.
Enviaven somnis asèptics i cansament concentrat.

I en la distància l’amor era desig.
I en la distància el desig era passió.
I en la distància es consumia la seva impaciència.

Varen alegrar les hores amb promeses de petons.
Varen sospirar amb ofrenes d’abraçades
i carícies
que cobrien les nits amb la calor dels seus cossos
i el fred de l’hivern.

Tot ho van fer i tot ho van intentar.

Al final varen concloure
que el millor era estimar-se
senzillament.

González Alonso

11 comentarios en “Sencillez

    • El poema nació en los años jóvenes universitarios en los que compartía piso con otros estudiantes, dos chicas y tres chicos. Un piso enorme del Ensanche barcelonés. Los fines de semana volvían a sus casas y sus amores, y los demás días -además de estudiar- se escribían cartas y se echaban mucho de menos. Poco a poco se fue calmando su ansiedad e hicieron bellos proyectos de futuro desde sus sueños. Fue admirable.

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      • Qué hermoso origen tiene ese poema, lleno de juventud, de distancia y de sueños compartidos. Se nota que está impregnado de una nostalgia serena, de esa etapa en la que todo es tan intenso y al mismo tiempo tan incierto. La imagen de ese piso del Ensanche barcelonés, con cartas, ausencias y promesas, tiene algo profundamente poético en sí misma.

        Es admirable cómo, en medio de la ansiedad y la espera, fueron capaces de construir ilusiones, de proyectar belleza desde la falta. Gracias por compartir ese contexto tan íntimo: le da al poema aún más vida y sentido.

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