Ataque a un enemigo de la libertad.- Cicerón

Ataque a un enemigo de la libertad
IMG20220809112559Cicerón

Editorial Taurus, 2021

La expresión popular “echar una filípica”, después de leer a Cicerón, cobra todo su sentido y no se nos escapa el alcance del dicho. No se ahorrará retórica ni ingenio siguiendo el ejemplo de Demóstenes, creador del invento unos trescientos años antes, en sus discursos contra Filipo II de Macedonia. En este discurso ante el Senado y en presencia del mismo Marco Antonio, Cicerón firmará su sentencia de muerte. Lo sabía, lo temía, y lo que temía y sabía se cumplió puntualmente. El 7 de diciembre del 43 a.C. fue asesinado cuando huía de Italia.

CiceronNo falta en la oratoria de Cicerón ningún exceso cuando se trata de señalar y denunciar las actuaciones ilícitas, extravagantes y torticeras de Marco Antonio. Lo más suave que se permite decir sobre él es que era un completo imbécil. Lo demás, criminal, ambicioso, anteponer sus intereses personales a los intereses de la República, perseguir de manera vergonzosa la gloria y prostituirse en la cama a cambio de dinero, son algunas de las perlas dejadas en forma de acusaciones vertidas en estas filípicas.

Define Cicerón la paz como la libertad en calma en unos tiempos terriblemente convulsos para Roma. Una guerra civil. Julio César, autoproclamado rey, será asesinado a manos de los defensores de la República y más defensores aún de sus propios intereses. Un crimen de Estado del que no anduvo lejoscesar-augusto-estatua Cicerón que deseaba su muerte y en el que se vio implicado Marco Antonio, el cual se apartaría pronto de su fervorosa intención de restaurar la República para, aprovechando los privilegios del poder, enriquecerse y convertirse en un nuevo sátrapa. Cicerón no se lo perdonará. Y Marco Antonio tampoco le perdonará a Cicerón su actitud de denuncia a favor de la República.

Las filípicas, además de servirnos para admirar el verbo de Cicerón y sus dotes oratorias a la hora de organizar los argumentos de su discurso, resultan de provecho para conocer y encontrar motivos suficientes con los que espantarse de lo que significó la situación política de la poderosa Roma, el maniqueísmo con que se apelaba al pueblo y la vergonzosa corrupción de todos sus estamentos. El panorama pintado por Cicerón en el lienzo de sus discursos no esconde ninguno de los vicios del poder ni sus odiosas consecuencias.

05-oleo-ira-fulvia-ciceron_6497ff62

Pero lo alarmante y que más debe preocuparnos es lo que nos encontramos al trasladar la mirada del duro retrato de Cicerón al panorama actual del que estamos siendo testigos y descubrir que más de 2.000 años de historia no hacen obsoletos el contenido de sus discursos. Hoy, con armas nucleares, ejércitos poderosos, apelaciones a la libertad, el pueblo y las democracias, el mundo pende de un hilo que sujetan dictadores declarados o encubiertos para justificar guerras y asesinatos, decretar leyes vergonzantes que atentan contra la libertad y la igualdad y lucrarse con toda esta miseria. ¿Hace falta nombrar algunos países? Pues apúntense a la lista los Estados Unidos de América, Rusia, Venezuela, Irán, Afganistán, Siria, China, Venezuela, Corea del Norte, Cuba… y los países acólitos europeos, uno por uno. La lista es muy extensa. Roma es hoy el mundo. Matemos a Cicerón.

González Alonso

8 comentarios en “Ataque a un enemigo de la libertad.- Cicerón

  1. ¡Magnífico, Julio!!! Que el poder corrompe es bien sabido, pero deberíamos volver a leer a los clásicos para dilucidar la situación actual, como dices, en nada diferente a otros tiempos y, sobre todo, para tener el valor de denunciar los atropellos y los disparates que se cometen todos los días. No conozco el discurso de Cicerón, pero lo buscaré. Muchísimas gracias, estimado Julio. Un cordial saludo.

    Le gusta a 1 persona

Replica a Julio G. Alonso Cancelar la respuesta