El vino siembra poesía en los corazones. Dante Alighieri
En aromas te envuelves y en sarmientos
te naces de la tierra dando el fruto
de la uva en su negro y fiel tributo
que acarician las aguas y los vientos.
Y es de todos los bellos nacimientos
que nos traes, que celebro y que disfruto,
el vino en sol forjado el oro bruto
merecedor de humanos cumplimientos;
porque si en verdes parras atesora
agua, tierra, la luz, fruto y memoria,
la inteligencia en su alma es la que mora.
No cabe al hombre, pues, más que a la historia
dar razón de la vida, aquí y ahora,
celebrando el regalo de esta gloria.
González Alonso
Aquí tenéis un link a la versión musicada de este precioso poema.
Paco
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Amigo Paco:
Encontré tu comentario en la carpeta Spam y lo he recuperado, aunque no aparece el enlace. De todos modos, ya tenemos otros recorridos por donde acceder. Gracias por tu trabajo. Con un abrazo.
Salud.
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Siempre eres bienvenida, amiga Ana; y si la ocasión es -además de la grata compañía- una buena copa de vino, creo que no se puede pedir más. Con las gracias y un abrazo.
Salud.
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Hola, Julio, después de un tiempo de ausencia regreso para degustar este maravilloso vino prodecente de las mejores uvas-versos de la cosecha, no queda más remedio que alzar la copa, brindir y embriagarse con su aroma y hermosura.Como siempre un gran placer disfrutar de tus versos.
Un beso grande que te llegue al corazón
Ana
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Buenoooooooooooo, con estos calores un buen vinito blanco fresquito, muy fresquito….pero sólo uno eh! que pronto me pongo piripi.
¿Qué tal ese veranito, poeta?
Yo de relax total y de monteeeeeeeeeee jajajaja, hasta que lleguen los días de playita en mi cantábrico adorado.
Cuídate y un abrazote fuertote
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Lo del relax total no sé cómo se compagina con ese miedo razonable a encarar Peña Ubiña, pero se ve que lo consigues, Sara. Mi veranito empezó en Berlín, en una visita que terminó ayer mismo y sobre la que -si la pereza no lo impide- dejaré algunas noticias e impresiones en la bitácora Lucernarios; seguirá, Dios mediante, por la tierrina leonesa y concluirá, allá por los finales del agosto, en Ibiza. Como verás, en mi horizonte no hay grandes montañas como las que acostumbras enfrentar, sino asfalto, cultura en forma de teatro, música, museos…, gastronomía y lo que el paisanaje de las urbes puede ofrecer. Bueno, Ibiza estará a caballo entre lo más natural de la isla y lo artificioso de su vida. Espero, no obstante, que todo resulte positivo.
Y, por supuesto, me encantará compartir esa copina de vino blanco y fresquito a pie de monte. Con las gracias y un fuerte abrazo veraniego.
Salud.
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Celebro este poema tuyo como corresponde: con la copa llena. Como lleno está el sentido que aquilata tu precioso verbo, encerrandolo tan magistralmente en estas hermosas estrofas. Encuentro antiguas resonancias en este liquido que fluye fresco y nuevo de las uvas y los sarmientos de tus rimas. Alzo, pues, mi copa, y exclamo ¡salud poeta!
Un abrazo.
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Amigo Perfecto, comparto entusiasmado tu brindis a la salud de la poesía y el futuro en medio de este verano que va y viene con sus calores, aunque hasta la fecha yo no los haya tenido que sufrir en exceso. Con un abrazo.
Salud.
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