Cuando perdamos todos nuestros dientes
seguiremos siendo jóvenes;
cuando la memoria traiga
recuerdos sin nombre,
seguiremos siendo jóvenes.
Desde el fondo de nuestras cataratas,
palpando entre las sombras de los ojos
seguiremos siendo jóvenes.
Cuando sintamos que los brazos pesan
como alas
de plomo, continuaremos abrazados
y seguiremos siendo jóvenes.
Cuando el árbol del entendimiento
seco y muerto
por sus raíces
nos confunda con sueños de aventuras
y en el camino encontremos a don Quijote,
seguiremos siendo jóvenes,
y el último suspiro
será como el primero del primer amor
que sólo los jóvenes conocen.
González Alonso
Lucernarios 
Preciosa oda a la madurez.
Fuerte abrazo, Julio, y salud.
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El último cartucho de la vida, amigo Pedro. No se puede desperdiciar. Un abrazo y salud.
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A pesar de todo, siempre seremos jóvenes mientras la vida nos permita seguir admirándola, aunque nos traiga recuerdos sin nombres.
Excelente escrito. 👏👏
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Creo que es tal como dices y sientes, Lincol. Mil gracias por tus palabras. Salud.
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la juventud la llevamos en el alma, amigo… Y por eso no envejecemos. Me encanta leerte. Abrazos desde México.
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Abrazos hasta México, Julie, y las gracias. Salud.
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